La plasticidad neuronal, la hiperacusia y el tinnitus




La plasticidad neuronal o cerebral es la cualidad o capacidad que tienen nuestro cerebro para modificarse a sí mismo, y adaptarse a nuevas situaciones. Sin embargo esta habilidad permanece dormida en nosotros hasta que haya algo que la active.

La plasticidad se activa cada vez que, por ejemplo, aprendemos alguna materia nueva, cuando tomamos contacto con nuevas culturas, cuando entablamos nuevas relaciones interpersonales, cuando alguna de nuestras funciones corporales se ve limitada, etc. Todas estas acciones hacen que nuestra red neuronal se modifique y establezca nuevas conexiones ante los estímulos experimentados.

Pero no es únicamente a través de estas experiencias positivas que la plasticidad cerebral se enciende. También lo hace producto de experiencias no deseadas o negativas, como es el caso del dolor, la privación de estímulos sensoriales, la sobreexposición al sonido (trauma acústico), malos hábitos, etc. Estas experiencias pueden producir una activación “dañina” de nuestra plasticidad, generando una modificación en la red neuronal que nos termine perjudicando. Aunque hay algunos especialistas que consideran que lo que sucede en realidad es que la plasticidad en estos casos no se llega a activar, lo cierto es que de alguna u otra manera se produce un cambio en la forma en que el cerebro procesa determinados estímulos.

En el caso específico del trauma acústico por ejemplo, se ha llegado a establecer una relación entre su ocurrencia y la activación de dicha plasticidad; y así mismo entre ésta y la aparición del tinnitus. Es decir que el tinnitus puede verse inducido por la activación de la plasticidad neuronal a causa de una sobrexposición al ruido.*

Sin embargo, es también a la capacidad plástica del cerebro a la que recurren diversas terapias de sonido que se administran para combatir tanto el tinnitus (buscando que el cerebro se acostumbre o habitúe a su presencia y sonido), como la hiperacusia (reeducando al cerebro a que tolere nuevamente los sonidos ambientales normales). En esta línea se encuentran las terapias de sonido más conocidas, como la TRT, la TSS, o la Neuronomics; y algunas menos convencionales como las terapias en base a música con muesca.



* Cabe aclarar que si bien el trauma acústico puede provocar la aparición del tinnitus, no es siempre debido a la activación de la plasticidad neuronal, pues eso dependerá de la región del sistema auditivo que haya sido afectado por el trauma.

Comentarios

Entradas populares