Otras formas de hipersensibilidad al sonido - 2/2




Como mencionara en la entrada anterior, existen otras dos formas de hipersensibilidad a los sonidos (además de la Hiperacusia, la Audición Hiperaguda, y el Reclutamiento), que no están vinculadas a problemas de tipo fisiológico o genético, sino más bien a problemas de tipo subjetivo o psicológico, y donde la hipersensibilidad no está tampoco relacionada necesariamente con la audición de sonidos fuertes. A continuación una breve descripción de cada una de ellas.



Fonofobia (Phonophobia)

Es el miedo extremo a ciertos sonidos que el paciente relaciona con “algo malo” o con algo que le puede causar daño o causar algún perjuicio. Es un problema de índole mental que provoca finalmente que el paciente perciba dichos sonidos de manera más intensa de lo que realmente son. Además del miedo a los ruidos percibidos en el momento, existe también una preocupación por los sonidos que cualquier evento pueda producir en el futuro cercano.

Es en cierta manera una forma extrema de Misofonía. La Fonofobia puede estar presente o no en pacientes con hiperacusia. Tratamiento: terapia psicológica (p.e. la terapia de desensibilización sistemática), medicación y/o terapia de sonido (cuando está asociada a un cuadro de hiperacusia)


Misofonía (Misophonia)

Es la aversión a ciertos sonidos específicos (pe. el sonido de la gente masticando, o el sonido de ciertas consonantes como la “s”, “t”, “p” o “c”), pero que no genere un miedo extremo como en la Fonofobia. sino más bien produce perturbación, molestia, fastidio, e inclusive rabia o enfurecimiento.

El término Misofonía (Misophonia) fue creado por el Dr. Pawel Jastreboff y la Dra. Margaret Jastreboff, con el fin de favorecer el entendimiento de este fenómeno y lograr diferenciarlo más claramente de otros muy parecidos.

La Misofonía puede estar presente o no en pacientes con hiperacusia. Tratamiento: terapia psicológica (pe. la terapia cognitivo-conductual), medicación, y/o terapia de sonido (cuando aparece asociada a la hiperacusia).



Cabe mencionar que hace unos años se produjo una controversia entre el término Misofonía y el de Síndrome de Sensibilidad a Sonidos Selectivos - 4S - (Selective Sound Sensitivity Syndrome). Ambos describían aparentemente el mismo problema, pero fue el de las 4S, acuñado por la Dra. Marsha Johnson, el que apareció primero. Si bien Misofonía es en la actualidad ampliamente reconocido y utilizado como término clínico para designar este tipo de problema auditivo, también se utiliza ahora alternativamente los términos: 4S, Síndrome de Sensibilidad a Sonidos Selectivos, o Síndrome de Sensibilidad a Sonidos Suaves. 

La Dra. Johnson establecía que la 4S representaba a un subgrupo de personas sensibles a sonidos específicos. Además consideraba que en este Síndrome existe un factor genético que al parecer no está presente en la Misofonía. Tratamiento: consejería y terapia psicológica y/o terapia de sonido. Esta última aunque no parece brindar beneficios a largo plazo ni lograr desensibilizar al paciente, puede ser de ayuda al aliviar la severidad de las reacciones y permitir al paciente disfrutar un poco más de la vida diaria. Este Síndrome a veces puede estar asociado al Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC), por lo que podría ser útil y necesario en estos casos, un abordaje psiquiátrico (o neurológico) y psicológico a la vez.


Enlace relacionado:
Otras formas de hipersensibilidad al sonido - 1/2

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Comentarios

Pandemia ha dicho que…
Perdona, pero la Misofonía no es un síndrome psicológico, es neurológico.
Gracias :)
Cuarto Mundo ha dicho que…
Imagino que este tipo de síndrome debe caer dentro del campo de la neurología como dices, pues el que acuñó el término es neurofisiólogo. Por lo demás, en el artículo no menciono que la misofonía sea un síndrome psicológico ni neurológico, lo que menciono es que como parte del tratamiento, es necesario una terapia psicológica, tal y como se recomienda también en la hiperacusia, que tampoco es necesariamente un problema psicológico en sí mismo.

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