Los riesgos de exponerse a sonidos muy fuertes
En esta oportunidad les dejo la traducción al castellano de un importante e interesante artículo publicado por la Hearing Health Foundation (Fundación
para la Salud Auditiva), en la sección “Keep Listening” (“Sigue Escuchando”) de
su página web; artículo que resalta los riesgos y consecuencias de exponerse a
ruidos y sonidos muy altos (entre ellos los de la música), y lo necesario que
resulta cuidar nuestros oídos*:
“ESCUCHEMOS TODOS LOS SONIDOS QUE AMAMOS... DE POR VIDA
El daño auditivo por escuchar sonidos muy fuertes y por
mucho tiempo es la mayor amenaza pública que la mayoría de personas desconoce.
La pérdida auditiva permanente es un riesgo global, especialmente entre la
gente joven.
La Organización Mundial de la Salud dice que hasta 1.1
billones de adolescentes y adultos jóvenes en todo el mundo están en riesgo de
pérdida auditiva por ruido excesivo. De acuerdo con la BMJ Global Health, esto
es igual a la mitad de la población en edades entre los 12 y 34 años, y el
peligro viene en particular, por usar audífonos de casco o de chupón, y de
asistir a lugares con música muy alta, todo a volúmenes nada seguros. El último
Estudio sobre la Audición, de Apple, estima que 1 de 3 adultos norteamericanos
que llevan puesto el Apple Watch está expuesto a excesivos niveles de ruido. Y
hasta 1 de 4 adultos norteamericanos en edades de 20 a 69, ya muestran signos
de pérdida auditiva ocasionado por la sobrexposición al ruido, de acuerdo al
los U.S. Centers for Disease Control and Prevention.
Charla real sobre la Audición
Seamos sinceros-vivimos con sonidos fuertes a diario, ya
sea el metro o el tráfico, la construcción o el paisajismo, un concierto o un
evento deportivo, los electrodomésticos de la cocina o la aspiradora, o incluso
una fiesta de cumpleaños o una boda. También pasamos horas y horas con
dispositivos personales de escucha y con audífonos.
Sin embargo, la abstinencia de oír no es el mensaje.
Ninguno de nosotros quiere renunciar a ver en persona a nuestro artista
favorito.
Solo necesitamos escuchar responsablemente
La mayoría de nosotros sabemos que debemos descansar
nuestros músculos y nuestros cuerpos después de un entrenamiento, y proteger
nuestra piel y nuestros ojos del excesivo sol. También sabemos que debemos
monitorear regularmente nuestra presión sanguínea y nuestra visión.
Es lo mismo para nuestros oídos. Después de estar
expuestos a sonidos fuertes, tomemos descansos en la escucha para permitir que
nuestros oídos se recuperen. Necesitamos llevar y usar constantemente tapones
de oídos cuando la situación lo requiera, al igual que usamos regularmente el protector
solar y los lentes de sol.
Hagámonos un examen de audición cada tres años, más
frecuentemente si trabajamos en un ambiente ruidoso- y si nuestro proveedor de
atención médica no nos pregunta de manera rutinaria acerca de nuestra audición,
necesitamos decírselo. Esto nos dará una base de referencia para estar al tanto
de cualesquiera cambios en el futuro.
El daño a nuestros oídos, ocasionado por ruido, puede dar
como resultado dificultad para oír, en especial el habla en ambientes ruidosos,
y tinnitus (zumbido en los oídos). También puede incluir hiperacusia, o
sensibilidad a los sonidos cotidianos, que con frecuencia se manifiesta junto
con el tinnitus.
¿Las buenas noticias? El daño auditivo causado por ruido
es totalmente prevenible. Nuestra audición es sumamente importante para nuestra
salud y bienestar general, como para darla por sentado. Cuidemos nuestra
audición para que podamos continuar disfrutando de todos los sonidos que amamos...
de por vida.”
Para ir al artículo original hacer clic
aquí
* Esta traducción es presentada aquí con el debido permiso de la editora del sitio web de la Hearing Health Foundation.
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