Recomendaciones adicionales sobre Familiares y Amigos - 2/3
Continuación de la lista de recomendaciones adicionales referidas a la Familia y Amigos (y otros) a realizar, cuando se padece de hiperacusia y acúfenos:
7. La conversaciones deben ser también señaladas. Cuando los adultos y los niños hablan, frecuentemente elevan sus voces para ser escuchados. El problema se inicia cuando una persona comienza a hablar antes de que la otra haya terminado. La única forma de que esto funcione es elevando el volumen de la voz por encima del de la otra, lo cual es una técnica usada cuando alguien busca atención e insiste en ser escuchada. Yo llamo a esto “conversación superpuesta”, y nosotros nos vemos en problemas cuando sucede. Sea muy sensible con esto.
8. Me afecta cómo los doctores, los audiólogos, y los adultos quienes tratan y cuidan a pacientes con sensibilidad al sonido, elevan sus voces o se ríen a un volumen insoportable cuando estamos nosotros presentes. Muchas veces tenemos que ser muy enérgicos y hacer recordar a estas personas que deben “ser silenciosas”. Esta es la única forma de que ellas se convenzan de que nosotros tenemos un problema.
Algunas veces Ud. tiene que preguntarles, “Por qué es tan difícil para Ud. hablar suavemente y ser sensible con el problema que yo tengo en mis oídos?. Ud. no tiene idea de lo que estoy pasando, como es evidente, debido a la forma en que Ud. se comporta cuando está a mi lado.
En estos tiempos, el mundo es muy comprensivo (compasivo) con las personas sordas o con deficiencias auditivas (como deberían serlo), sin embargo ninguna consideración es tenida con aquellos de nosotros que somos sensibles al sonido. Es momento de que los doctores se bajen de su pedestal y que los pacientes dejen de hincarse (arrodillarse, humillarse). Recuerde que ellos están trabajando para Ud. y están siendo pagados muy bien por hacerlo.
La conversación a alto volumen (ruidosa) es la razón por la cual nosotros encontramos muy difícil ser parte de las reuniones familiares. Nos sentimos mal de que los demás estén constantemente cautelosos cuando estamos en su presencia y que encima dependamos de su sensibilidad hacia nuestro estado.
9. Algunas veces Ud. habrá notado que nosotros hablamos más suave, parecemos roncos, o inclusive susurramos. Esto puede ser por tres motivos:
1) Podríamos hablar suavemente o volvernos roncos si nuestros oídos están particularmente mal y hemos sufrido un accidente sonoro reciente. Algunas veces inclusive es difícil para nosotros escuchar nuestra propia voz si es que nuestros oídos están pasando por un mal momento.
2) Como se mencionó anteriormente, nuestros oídos son más sensibles temprano en la mañana o tarde en la noche. Esto tiene un efecto en el volumen de nuestra voz.
3) Tendemos a hablar suavemente porque eso a menudo evoca una respuesta suave y de bajo volumen de parte de la persona a quien le estemos hablando.
10. Las voces de las mujeres y los niños son usualmente una octava más alta (el doble de aguda) que la de los hombres.
(Continuará en las siguientes entregas)
Textos extraídos y traducidos de la pag web de The Hyperacusis Network (sección Supplement), con la autorización de su editor. (ver “enlaces importantes” en este blog).
Enlaces relacionados:
- Recomendaciones...sobre Familiares y Amigos - 3/3.
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