Recomendaciones adicionales sobre Cambio de Hábitos - 3/3

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Ultima parte de la lista sobre Cambio de Hábitos a realizar cuando se padece de hiperacusia y acúfenos:

15.
Si Ud. asiste a un evento público y sabe que aplausos y cantos serán parte de las festividades, siéntese en la última fila. De esta manera nadie estará aplaudiendo o cantando en sus oídos. Algunas veces los aplausos pueden ocurrir en los lugares más inesperados, como en la iglesia. En aquellas situaciones sorpresivas, Ud. siempre podrá taparse sus oídos con los dedos.

16. Algunas iglesias ofrecen servicios religiosos sin música, las cuales deberían ser frecuentadas en todo lo posible. Algunos de nosotros nos sentamos dentro de capillas, cuartos para señoras (cuando no hay niños presentes), el vestíbulo de la iglesia, o el cuarto del clérigo (sacristía). Otra opción es ir a un servicio religioso temprano en la mañana o verlo por televisión.

17. En los restaurantes, trate de sentarse lejos de la cocina o la zona donde se acumulan los platos sucios… Es mejor ir a un restaurante donde el mesero (camarero) recoja los platos y cubiertos en un azafate. Si Ud. come durante los períodos fuera de hora (antes de las 11 am., después de la 1:30 pm., antes de las 4:30 pm. o después de las 7 pm.) será mucho mejor, porque el nivel de ruido es más bajo. Si Ud. va a un restaurante nuevo, solo pídale al encargado que lo ubique en el área menos ruidosa que tengan… Permanezca lejos de los ambientes en lo que se toque música a volumen alto porque la gente tiende a hablar más fuerte para compensar el ruido. Los restaurantes de comida rápida (fast food) utilizan un beep bien agudo para avisar que las papas fritas están listas. El beep es tan agudo que hace que nuestros oídos prácticamente se estremezcan. En estos restaurantes busque un lugar tan alejado de la cocina como sea posible. Además, no se siente en mesas que estén directamente debajo de los parlantes del techo. Nosotros detestamos comer con los tapones de oídos puestos, toda vez que escuchamos el sonido al masticar y pasar los alimentos.

18. Las salas de cine son lugares muy ruidosos… Algunas veces puede resultar asistir si vamos durante la semana, porque las salas bajan el volumen al haber menos público asistente. Incluso si ellas no lo hicieran, podrían estar más receptivas si Ud. lo pidiese. Algunos de nosotros asistimos, pero utilizando mayor protección auditiva (tapones de espuma y/o orejeras)… No importa qué, siempre siéntese en la última fila, de tal manera que nadie grite (o hable fuerte) detrás suyo, y trate de llegar a la sala de cine temprano… Alquilar películas puede ser muy grato. @

Textos extraídos y traducidos de la pag web de The Hyperacusis Network (sección Supplement), con la autorización de su editor. (ver “enlaces importantes” en este blog)


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